Nueva reforma fiscal en Colombia: Criptos en la mira

¿Qué está pasando en Colombia? Pues si aún no lo sabes, en estos mismos momentos, están viviendo un momento decisivo en términos fiscales, pues bajo la necesidad del gobierno de recaudar aún más ingresos y combatir así el déficit, se presentó un nuevo proyecto de reforma tributaria, con foco en la economía digital.
Y es que este anuncio se ha dado en medio de un año que, para Colombia, ha estado lleno de presiones por el bajo recaudo tributario alcanzado el pasado año.
Si bien la idea es poder sostener programas sociales, sectores que hasta ahora tenían cierta libertad, pronto tendrán las manos del estado sobre ellos: Las criptomonedas y apuestas online. En este blog te informaremos todo lo que debes saber.
Resulta que la Dirección de Impuestos y Aduanas (DIAN), comunicó que estás medidas no se basan en crear nuevos impuestos hacia las personas, sino que es un proyecto para reforzar los mecanismos de control y evitar así la evasión.
Y es que el Estatuto Tributario establece no solo que la DIAN es el órgano encargado del asunto tributario, sino que también dice cómo deben declararse las ganancias patrimoniales. En caso de las criptos, si bien no son reconocidas como una moneda de curso legal, si están sujetas al Impuesto sobre la renta y complementarios, bajo el nombre de activos intangibles.
A grandes rasgos, cualquier aumento de patrimonio está sujeto a pagar impuestos, y en este caso las criptos no quedan fuera, si ganabas dinero con criptos, siempre ha sido tu obligación tributaria declararlo y pagar por ganar. Ahora el foco está en “poner mano dura a la evasión”.
Bajo este mismo punto es que los activos digitales entraron a considerarse como representaciones intangibles de un derecho susceptible de valoración, quedando sujetos al cobro de IVA. Lo que hace poco era visto como un mercado en expansión, ahora es un contribuyente directo.
Es dentro de este proyecto que se establece que si un ciudadano Colombiano decide vender sus criptomonedas luego de 4 años de tenencia, las ganancias estarán gravadas con una tarifa del 30%.
Y claro, quienes decidan normalizar activos no reportados, tendrán un impuesto del 15%, pues el mensaje es claro: La DIAN no quiere perder ni un solo peso.

Para evitar confusiones, si bien la situación actual establece que el periodo de ganancia ocasional es de 2 años, eso implicaba una tarifa de ganancia que llegaba hasta un 15%, con la propuesta de reforma lo que se busca es establecer que la ganancia ocasional sea en un rango de 4 años, con una tarifa de ganancia del 30% en activos mantenidos.
¿Qué pasa con los exchanges y billeteras digitales?
Por otra parte, en este punto sucede que los exchanges y todos aquellos que sean proveedores de billeteras digitales, deberán reportar los movimientos que superen los 1.400 UVT anuales, lo que equivaldría a unos 1.500 dólares.
Esto quiere decir que el estado Colombiano tendrá acceso a información cada vez más detallada sobre cómo y cuánto transaccionan los usuarios en ámbitos de criptomonedas, algo que debería ser impensable en un sistema financiero descentralizado.
Si bien es cierto que en Colombia según el Estatuto Tributario se exige la declaración de operaciones con criptos desde hace 4 años, en realidad sucede que cualquier aumento patrimonial se debe declarar y está sujeto a impuestos, por mucho que no se haya hablando en un pasado sobre criptos, solo por el hecho de aumentar tu patrimonio, lo debes declarar.
Los planes actuales del estado vienen a fortalecer el control fiscal sobre este asunto, cerrando cualquier espacio que exista para evadir impuestos, espacios que al día de hoy, le permitía al sector de los activos digitales funcionar con tributaciones mínimas.
El hecho de pensar en el sector de las criptomonedas y activos digitales en general, es la determinación del gobierno sobre cómo abarcar cada rincón de la economía digital y que ningún bolsillo colombiano quede exento de la larga y pegajosa mano fiscal.
¿Cuál es la narrativa oficial por parte de Colombia?
Funcionarios y congresistas afines al gobierno de turno, defienden la iniciativa del proyecto, pues argumentan que estos cambios solamente buscan una mayor equidad para las personas. Dentro del discurso, aclaran que este paso es clave en el camino hacia el futuro, pues se garantiza la sostenibilidad fiscal.
Pero la cosa no se queda ahí, pues hay críticos de peso, como Lisandro Junco, ex director de la DIAN, que advierte sobre un riesgo imparable que podría hacer colapsar al sistema mismo, escondido ahí detrás de las cifras.
Pasa que los nuevos impuestos, incluido el IVA sobre activos digitales, eventualmente se traspasarán al consumidor final, lo que afectaría irremediablemente a la clase media y baja, perjudicando sin medida su situación económica y calidad de vida, beneficiando únicamente al estado de turno.

Frente a esta situación, la senadora Angélica Lozano no se ha quedado callada y alzó la voz en contra de las recientes medidas, pues considera estas reformas un exceso, recordando que, además de las criptos, hay otros puntos, como deducciones por dependientes e incluso cuotas de administración de propiedades horizontales.
¿En qué está el proyecto y cuándo empieza?
Si bien aún hay tiempo de salvación, pues el proyecto se encuentra en el inicio de su recorrido en el Congreso, la DIAN dijo que no esperará pasivamente, pues ya cruzan datos con bancos y entidades financieras, vigilando de cerca cualquier movimiento en blockchain.
Lo que es una realidad, es que aún faltan intensos debates en torno a esta iniciativa, y si bien no hay una fecha clara, algunos legisladores ya anticipan que las medidas sobre criptos podrían suavizarse tanto como endurecerse, pero todo dependerá del pulso político.
Lo que esconde la letra chica de todo esto, y es lo que más preocupa a la comunidad, es que si bien el discurso desde el gobierno apunta a controlar la evasión de impuestos, queriendo controlar a los grandes evasores multinacionales que operan sin licencia, la luz del foco estará en personas como tú y como yo.
Si se entra a analizar con cuidado todo el proyecto, vemos que la obligación de reporte e impuestos que se establecen, aplican para multinacionales, sí, pero de igual forma aplican a pequeños inversionistas locales, a quienes realmente pueden hacer valer y dejar caer todo el peso de la ley sobre ellos.
Esto significa que el joven visionario que compró un par de Satoshis en 2018, esperanzado en proteger sus ahorros, o incluso, en un futuro de libertad financiera, hoy por hoy en ámbitos legales, puede llegar a ser igual de culpable y enfrentarse a las mismas consecuencias que una casa de apuestas online multinacional que mueve millones de dólares al día.
Lo que se disfraza como una reforma pensada en “los peces gordos”, terminó dejando ver su verdadero rostro al revelarnos que el impacto iba de igual manera al ciudadano común que operaba con criptos como una solución financiera frente a la volatilidad del peso Colombiano.
Lo que alguna vez fue la promesa de libertad frente al abuso de los estados sobre nuestros bolsillos, hoy por hoy se ha convertido en la pesadilla de las personas comunes, pues choca de frente con el aparato tributario que ha entablado una cacería de brujas para no dejar ir ningún solo bloque de la cadena.
Cuéntanos en X cuál es tu opinión sobre todo lo que se viene para Colombia con este nuevo proyecto que aún está entre debates, y recuerda que en Instagram subimos actualizaciones del mundo cripto todas las semanas.