¿Los aranceles de Trump pueden desencadenar una crisis?

Como bien hemos hablado en otras ocasiones, el presidente Donald Trump tiene planes radicales en cuanto a la economía de Estados Unidos, y si bien se ven buenas estrategias en papel, la verdad es que muchos se preguntan por el largo plazo de estas medidas.
Sabemos que la historia tiende a repetirse de cierta forma, y cuando hablamos de aranceles, podemos observar lo que pasó en 1931, año en el que EE.UU. elevó violentamente los aranceles bajo la ley Smoot Hawley, lo que llevó a represalias y el colapso del comercio global.
Hoy en día estas consecuencias tienen el nombre de La Gran Depresión, y nadie quiere enfrentarse a una Gran Depresión 2.0, pues el verdadero temor es que con los aranceles de Donald Trump, los insumos se encarecen y super mercados como la industria automotriz europea, se ven obligados a replantear sus inversiones en Estados Unidos.
¿Cuáles son los aranceles de Trump?
Primero que todo, entendamos un poco mejor cuáles son las propuestas del presidente norteamericano, y a qué áreas apunta específicamente.
1.- Tarifas recíprocas: Fue en abril de este mismo año, que Donald J. Trump estableció un arancel mínimo del 10% sobre todas las importaciones, excluyendo de este tratado a Canadá y México, sus países vecinos, y variando las tarifas según cada país, según sus balances y políticas de IVA.
2.- Tarifas específicas por país: Estas tarifas varían según cada país, según balances, políticas de IVA y otros criterios. China se enfrenta a un 30%, India desde el 27% se le agregó un arancel de emergencia del 25% adicional a uno que ya existía, y otros países que podrían llegar a tener tarifas de hasta un 70%.
3.- Tarifas a metales: Aquí industrias de acero y aluminio pasaron de aranceles del 25% al 50% por orden directa de la Casa Blanca, protegiendo industrias consideradas críticas para la seguridad nacional.
4.- Aranceles de tecnología: Lo que se evalúa aquí es imponer un arancel de hasta un 300% a los semiconductores, incluidas tarjetas gráficas de alta gama, lo que podría disparar los precios a elevadas cifras.
Si bien la política arancelaria de Trump se ha llevado críticas, el foco que mantiene y la postura que defiende el presidente, es priorizar la industria nacional, sin embargo estas medidas, hoy por hoy, generan confusión e incertidumbre global.

Consecuencias de los aranceles de Trump:
Si hay una receta para generar una crisis global, sin duda los pasos serían subir fuertemente los aranceles, igual que en 1931, aquí siguen los socios comerciales del país tomando represalias, todo se vuelve insostenible, los negocios empiezan a cerrar y se desploma todo.
Hoy todos los aranceles que ha propuesto D. J. Trump, pueden hacer que se disparen las cifras de desempleo interno del país, y a su vez, que todo suba drásticamente de precio. Las últimas cifras en representación del empleo no agrícola, muestran lo débil que está la situación.
De hecho, si evaluamos las cifras de los últimos dos años, las del mes pasado son las peores que ha tenido la industria a nivel de desempleo, lo que fue una causal para que Trump le pidiera a la FED bajar las tasas, como lo analizamos en el blog pasado.
Sin embargo, Powell, quién aún está en el cargo, insiste en esperar a que Trump cancele los aranceles, ya que mientras sigan vigentes, no impulsará recortes. Sin duda una conversación que no llegará a puerto hasta el próximo presidente de la FED.
Neel Kashkari, de la FED, dijo que la desaceleración económica ya es evidente y que bajar tasas si es una opción real en caso de que los datos lo sigan respaldando, pero también advirtió que si los aranceles disparan la inflación, podrían verse obligados a frenar o incluso volver a subir tasas.
Consecuencias de los aranceles de Trump en el mundo:
Claro está saber que las consecuencias de todo esto, no solo afectarían a Estados Unidos, sino que tendría repercusiones a nivel global, algunas de estas serían inmediatas, mientras que otras podrían darse con el tiempo.

1.- Comercio internacional débil: Los aranceles encarecen las exportaciones y se reduciría el volumen de intercambios, lo que provocaría un menor dinamismo en el comercio.
2.- Inflación global: Si se paga más por algo, como el acero, o tecnología, los precios para los consumidores también suben, reglas básicas, el tema viene cuando esa presión inflacionaria se exporta al resto del mundo, desequilibrando la economía.
3.- Reconfiguración de cadena de suministro: Empresas internacionales podrían mover su producción fuera de Estados Unidos para evitar aranceles, pero eso encarecería la logística y aumentaría la incertidumbre.
4.- Riesgo de desaceleración mundial: A menor comercio, menor inversión o inversión paralizada, si sumas esas dos cosas, tienes un crecimiento global más bajo, desencadenando una guerra comercial que le restaría entre 1 a 2 puntos al PIB mundial en un mediano plazo.
5.- Volatilidad financiera: Mercados emergentes dependen de exportaciones, si esto se frena, sus monedas se deprecian generando crisis económica en países vulnerables.
6.- Tensión entre políticas económicas: Bancos centrales entran en un dilema aquí, pues ¿deberían bajar las tasas para estimular el crecimiento, o mantenerlas para frenar la inflación? Dos escenarios que están golpeando puertas y ventanas, y podría llevar a políticas monetarias descoordinadas a nivel global.
7.- Riesgo geopolítico: Los aranceles, por lo demás, también son un arma política que podría agravar las tensiones con China, India y la Unión Europea, aumentando la posibilidad de bloques comerciales rivales, como Estados Unidos vs Asia.
Y todo lo anterior son solo algunos de los escenarios a los que nos enfrentaremos en caso de una nueva crisis global, pero sin duda, todo plantea inestabilidad para todos los países y nuevas tensiones marcando una era gris.
Paralelismo entre 1931 y 2025:
Al igual como uno lee las velas en las inversiones, analiza el largo plazo junto con la trayectoria y observa ciclos, aquí podemos adelantarnos a lo que se viene, pues los inicios que llevaron a una Gran Depresión, son los mismos a los que nos enfrentamos hoy en día.
Es innegable que existe un paralelismo entre estos dos años, y he ahí el temor de muchos cuando se habla de lo que realmente podrían causar las acciones que está tomando Donald Trump, pues si bien ya existe una crisis, todo lo que mencionamos, podría profundizarla.
En ambos años ya había una crisis mundial, y todas las medidas que se tomaron, fueron las que eventualmente profundizaron en dicha crisis. En caso de seguir por este camino, podríamos ver un menor crecimiento global, mercados más volátiles y cifras de desempleo desbordadas.
¿Crees que estamos tocando las puertas de una Gran Depresión II? Coméntanos en X cómo crees que se va a desenvolver todo, o revisa nuestro Instagram para no perderte ningún dato. Lo importante es no olvidar: Cuando hay sangre en las calles, compra propiedades.